La avezada sommelier peruana Malka Jiménez dedicó un certero y extenso análisis a “Legno Viejo”, el primer Carignan de Tupper Family Wines, para lo que preparó un exquisito maridaje.
Aquí, el texto íntegro:
El vuelo en solitario de Legno Viejo, 100% Carignan.
«Ahora cuando pienso en los vinos chilenos elaborados con cepas más rústicas viene a mi mente la vida en el campo, las viejas casas de adobe, las hermosas vides plantadas desde épocas coloniales y lo más importante su gente y aquellas tradiciones rurales que siguen a flor de piel. Esa es la magia del vino, evocar recuerdos.
Este Legno Viejo, es el primero en salir a la escena vitivinícola chilena para la familia Tupper. Su viñedo, La Higuera, está en pleno Valle del Maule, muy cerca al río Loncomilla y plantado en su totalidad con vides de cepa país. A la fecha cumplen 126 años de vida y son la base sólida y fuerte sobre la cual se ha injertado este carignan y algunas variedades bordelesas y mediterráneas. La conducción de esas parras está en forma de cabeza y sin riego, muy al estilo de las zonas del secano costero del Maule y el sur del país. Una perfecta simbiosis entre viticultura tradicional y contemporánea.
Algo que es un bono para las cepas de maduración larga es el clima mediterraneo seco y con lluvias que solo se dan en el periodo de reposo de la planta. Sea por latitud y cercanía a la cordillera de los andes, la cordillera de la costa y el mar pacifico es que crea una gran amplitud térmica, además que sirven como regulador de las temperaturas cálidas de verano. De esa manera las vides logran descansar, acumulando más acidez y carga aromática.
Legno Viejo 2018 es un vino que se pensó para que haga su vuelo en solitario, tiene el soporte y la talla para hacerlo. Es una expresión varietal de la carignan, con un enfoque claro, mostrando un vino pulido, equilibrado, con fuerza y presencia, pero con cierta elegancia. Algo difícil de lograr en una cepa de estilo más rústico.
Es un vino de taninos redondos fácil de disfrutar a pesar de tener un nivel de alcohol importante, pero integrado plenamente a esa fruta roja muy fresca y algo de negra, pero ya maduras sin ser un “fruit bomb”. Adornadas de notas a violetas, hierbas aromáticas y especias dulces gracias a los19 meses de crianza en barricas francesas usadas y los 5 meses en estiba.
Como dirían los americanos @tupperfamilywines, you nailed it!
